Vida y Obra del Apóstol PabloCapítulo 5LA OBRA QUE AGUARDABA AL OBRERO |
domingo, 30 de junio de 2013
Pablo estaba ahora en posesión de su evangelio, y conoció que la misión de su vida era predicarlo a los gentiles.
Había tratado de predicar en Damasco donde ocurrió su conversión. Pero inmediatamente fue forzado a huir de la furia de los judíos, y yendo de allí para Jerusalén y comenzando a testificar como cristiano encontró en dos o tres semanas demasiada oposición.
Estas no son más que meras conjeturas motivadas por la penumbra histórica de aquellos años.
>Su Obra< Alli Tan luego como este hecho aconteció, el campo estuvo listo para la carrera de Pablo e inmediatamente fue abierta una puerta para su entrada en él.
Cuando fue enviado para presidir el avivamiento en Antioquia pronto se encontró embarazado con su magnitud y sintió la necesidad de ayuda.
Al verle afrontando, al fin, la obra de su vida, detengámonos para hacer una breve revista del mundo, al cual fue enviado a conquistar. Nada menos que esto se propuso.
Los griegos fueron los primeros en tomar posesión del mundo. Fueron el pueblo de destreza y genio, los maestros perfectos del comercio, de la literatura y de las artes.
Los Romanos
En seguida tocó su turno a los romanos en la posesión del globo.
Entretanto, la tercera nación de la antigüedad también había completado su conquista del mundo.
Tal fue, pues, el mundo al que Pablo fue enviado a conquistar.
martes, 25 de junio de 2013
ANTIGUO CONSEJO CHINO
Había una
vez un campesino chino, pobre pero sabio, que trabajaba la tierra duramente con
su hijo.
Un día el
hijo le dijo:
-¡Padre, qué
desgracia!
Se nos ha
ido el caballo.
-¿Por qué le
llamas desgracia? -respondió el padre.
Veremos lo
que trae el tiempo...
A los pocos
días el caballo regresó, acompañado de otro caballo.
-¡Padre, qué
suerte! - exclamó esta vez el muchacho.
Nuestro
caballo ha traído otro caballo.
-¿Por qué le
llamas suerte? - repuso el padre.
Veamos qué nos
trae el tiempo.
En unos
cuantos días más el muchacho quiso montar el caballo nuevo y éste no
acostumbrado al jinete se encabritó y lo arrojó al suelo.
El muchacho
se quebró una pierna.
-¡Padre, qué
desgracia! - exclamó ahora el muchacho.
¡Me he quebrado
la pierna!
Y el padre
retomando su experiencia y sabiduría sentenció:
-¿Por qué le
llamas desgracia?
¡Veamos lo
que trae el tiempo!
El muchacho
no se convencía de la respuesta sino que gimoteaba en su cama.
Pocos días
después pasaron por la aldea los enviados del rey buscando jóvenes para
llevárselos a la guerra.
Vinieron a
la casa del anciano pero como vieron al joven con su pierna entablillada lo
dejaron y siguieron de largo.
El joven
comprendió entonces que nunca hay que dar ni la desgracia ni la fortuna como
absolutas sino que siempre hay que darle tiempo al tiempo para ver si algo es
malo o bueno.
La moraleja
de este antiguo consejo chino es que:
"la
vida da tantas vueltas, y es tan paradójico su desarrollo, que lo malo se hace
bueno y lo bueno malo”.
Lo mejor es
esperar siempre el día de mañana, pero sobre todo confiar en DIOS porque todo
sucede con un propósito positivo para nuestras vidas...
Recuerda
siempre que “Todas las cosas nos ayudan para nuestro bien esa es una promesa de
Dios para nuestras vidas.
Que el Dios
de amor y de paz envíe su Santo Espíritu sobre ti y derrame abundantes
Bendiciones sobre ti y todos los tuyos.
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ESTE CONSEJO CON TUS AMIGOS
Si tienes
alguna duda o estas inquieto por algo no dudes en comunicarte con nosotros
estamos para ayudarte en oración o consejería Cristiana Escríbenos a: peticiones@tunuevaalegria.com.ve
sábado, 15 de junio de 2013
Para todos los padres del mundo en su día ·Dios les Beniga hoy,mañana y por siempre·
Papito... ¿Cuánto me
amas?
El día que mi Hija nació, en verdad no sentí
gran alegría.
Porque la
decepción que sentía parecía, ser más grande que el gran acontecimiento que
representa tener una hija.
REFLEXIONANDO
A los dos
días de haber nacido, fui a buscar a mis dos mujeres, una lucía pálida y
agotada y la otra radiante y dormilona.
En pocos
meses me dejé cautivar por la sonrisita de mi hija y por la infinita inocencia
de su mirada fija y penetrante, fue entonces cuando empecé a amarla con locura.
Su carita,
su sonrisita y su mirada no se apartaban ni por un instante de mis
pensamientos, todo se lo quería comprar, la miraba en cada niño o niña, hacía
planes sobre planes, todo sería para mi hijita.
Este relato
era contado a menudo por Randolf, el padre de la niña y yo también sentía gran
afecto por ella ya que era la razón más grande para vivir de Randolf según
decía él mismo.
Una tarde
estaba mi familia y la de Randolf, haciendo un picnic a la orilla de un río cerca
de casa y la niña entabló una conversación con su papá, todos escuchábamos:
Papi,...
cuándo cumpla quince años ¿Cuál Será mi regalo?
-Pero mi
amor, si apenas tienes diez añitos, ¿No te parece que falta mucho para esa
fecha?
Bueno
papito,... tú siempre dices que el tiempo pasa volando, aunque yo nunca lo he
visto por aquí.
La
conversación se extendía y todos participamos de ella. Al caer el sol
regresamos a nuestras casas.
Una mañana
me encontré con Randolf enfrente del
colegio donde la niña estudiaba, quien ya tenía catorce años.
Randolf se
veía muy contento y la sonrisa no se apartaba de su rostro.
Con gran
orgullo me mostraba las calificaciones, eran notas impresionantes, ninguna
bajaba de diez puntos, o, sobresaliente y los estímulos que les habían escrito
sus profesores eran realmente conmovedores, felicite al dichoso papá.
La niña
ocupaba toda la alegría de la casa, en la mente y en el corazón de la familia,
especialmente en el de su papá.
Fue un
Domingo muy temprano cuando nos dirigíamos a la Iglesia, cuando la niña tropezó
con algo, eso creíamos todos y dio un traspié, su papá la agarró de inmediato
para que no cayera...
Ya
instalados en la iglesia, vimos cómo fue cayendo lentamente sobre el banco y
casi perdió el conocimiento.
La tomamos
en brazos, mientras su papá buscaba un taxi hacia el hospital.
Allí
permaneció por diez días y fue entonces cuando le informaron que su hija
padecía una grave enfermedad que afectaba seriamente su corazón, pero no era
algo definitivo, qué debían practicarle otras pruebas para llegar a un
diagnóstico firme.
Los días
iban pasando, Randolf renunció a su trabajo para dedicarse a su cuidado, su
madre quería hacerlo pero decidieron que ella trabajaría, pues sus ingresos
eran superiores a los de él.
Una mañana Randolf
se encontraba al lado de su hija, cuando ella le preguntó:
-¿Voy a
morir, no es cierto? ¿Te lo dijeron los doctores?
-- No mi
amor... no vas a morir, Dios que es tan grande, Él no permitiría que pierda lo
que más he amado sobre este mundo, respondió el padre.
-Los que
mueren ¿Van a algún lugar? ¿Pueden ver desde lo alto a su familia? ¿Sabes si
pueden volver? preguntaba su Hija.
-- Bueno
hija,... en verdad nadie ha regresado de allá a contar algo sobre eso, pero si
yo muriera, no te dejaría sola, estando en el más allá buscaría la manera de
comunicarme contigo, en última instancia utilizaría el viento para venir a
verte.
-¿Al viento?
¿Y cómo lo harías?
-- No tengo
la menor idea hijita, solo sé que si algún día muero, sentirás que estoy
contigo, cuando un suave viento roce tu cara y una brisa fresca bese tus
mejillas.
Ese mismo
día por la tarde, llamaron a Randolf, el asunto era grave, su hija estaba
muriendo. Necesitaban un corazón, pues el de ella no resistiría sino unos
quince o veinte días más.
¡UN CORAZÓN!
¿Dónde
hallar un corazón?
¡Un corazón!
-¿Dónde Dios
mío?
Ese mismo
mes su hija cumpliría sus quince años. Y fue el viernes por la tarde cuando
consiguieron un donante, una esperanza iluminó los ojos de todos, las cosas
iban a cambiar.
El Domingo
por la tarde ya estaba operada, todo salió como los médicos lo habían planeado.
¡Éxito
total!
Sin embargo,
Randolf todavía no había vuelto por el hospital y la niña lo extrañaba
muchísimo, su mamá le decía que ya todo estaba muy bien y que su papito sería
el que trabajaría para sostener la familia.
La niña
permaneció en el hospital por quince días más, los médicos no habían querido
dejarla ir hasta que su corazón estuviera firme y fuerte y así lo hicieron.
Al llegar a
casa todos se sentaron en un enorme sofá y su mamá con los ojos llenos de
lágrimas le entregó una carta de su padre:
"Hijita
de mi corazón: Al momento de leer mi carta, ya debes tener quince años y un
corazón fuerte latiendo en tu pecho, esa fue la promesa que me hicieron los
médicos que te operaron.
No puedes
imaginarte ni remotamente cuanto lamento no estar a tu lado en este instante.
Cuando supe
que ibas a morir, decidí dar respuesta a una pregunta que me hiciste cuando
tenías diez añitos y a la cual no respondí.
Decidí
hacerte el regalo más hermoso que nadie jamás haría por mi hija...
Te regalo mi
vida entera sin condición alguna, para que hagas con ella lo que quieras, te
regalo mi corazón.
¡¡Vive hija!!
¡¡Te amo con
todo mi corazón!! "
Lloró todo
el día y toda la noche; al día siguiente fue al cementerio y se sentó sobre la
tumba de su papá; lloró como nadie lo ha hecho y susurró:
“Papi,...
ahora puedo comprender cuanto me amabas… yo también te amaba y aunque nunca te
lo dije, ahora comprendo la importancia de decir "Te Amo" y te
pediría perdón por haber guardado silencio tantas veces ".
En ese
instante las copas de los árboles se mecieron suavemente, cayeron algunas hojas
y florecillas, y una suave brisa rozó sus mejillas, alzó la mirada al cielo,
intentó secar las lágrimas de su rostro, se levantó y emprendió regreso a su
hogar.
Si este
mensaje tocó tu corazón, envíalo a tus mejores amigos como señal de tu amistad…
Por favor nunca dejes de decir "TE AMO"… No sabes si será esa la
última vez...
CADA DIA A
CADA INSTANTE EXPRESA TU AMOR A LOS
SERES QUE MAS AMAS…
Si este
mensaje ha impactado tu vida, recuerda un amor mucho más grande que el del
Padre de nuestra historia; ese es el
amor de Dios hacia nosotros, ya que Él no escatimo en sacrificar a su Divino
Hijo Jesucristo, para que todos aquellos que en Él creamos no muramos, más bien
que tengamos vida en abundancia en Cristo Jesús.
Pues solo
por medio de Él llegaremos ante nuestro Padre Celestial a gozarnos de la vida
eterna en su Gloría y en ningún otro hay salvación.
Entrégate al
AMOR de Jesús...
Si deseas
conocer más del amor de Dios por ti, te invito a que conozcas más de su Divina
Palabra en: www.tunuevaalegria.com.ve
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