“ADULTERIO"
El título de este tema sugiere que no debiera ser de interés para los Cristianos puesto que todos conocemos el mandamiento de Dios que dice: “No cometerás adulterio” Éxodo 20:14 y las palabras de Jesús quien dijo: “y a cualquiera que mirare a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón” Mateo 5:28, sin embargo aunque parezca poco creíble, Satanás a doblegado a algunos creyentes haciéndolos caer en el pecado del adulterio, pese a conocer esta prohibición.
¿Que es el adulterio?
En palabras sencillas, se refiere a la relación sexual en una pareja donde uno o ambos son casados con otra persona, pero a su vez tienen relaciones sexuales con otra persona que no es su Esposo(a).
En nuestros días no es raro leer en los diarios y revistas o mirar entre nuestros conocidos y más aun en la TV o el cine como se ha difundido esta actitud negativa en la sociedad como algo “común y aceptable”, y aunque la estadística muestra que el varón es mas tendencioso a caer en el adulterio, para sorpresa de muchos, el adulterio ha ido en incremento entre las mujeres, y quiero referirme a mujeres casadas, ya que partiendo del hecho que la relación sexual ilícita donde uno o ambos son casados con una tercera persona, se entiende que la pareja es adúltera, y por tanto el varón como la mujer están al mismo nivel cometiendo adulterio (aun para el que es soltero). La aclaración cabe ya que hay cada vez más mujeres casadas que engañan a su cónyuge cometiendo adulterio.
Dentro de los argumentos que utilizan los adúlteros para justificar su actitud hay dos muy comunes, el primero es:
“He dejado de querer a mi pareja ó, mi pareja no me ama”
El segundo es: “Mi pareja no me satisface, porque no es complaciente o porque ya no me gusta”.
Por supuesto hay un sin fin de argumentos más, pero estos dos se repiten constantemente. También sucede con mucha frecuencia que los adúlteros se “enamoran” uno del otro, esto cuando el pecado se comete con la misma persona, ya que hay quienes adulteran con diferentes personas. Recuerdo el caso de una creyente que me decía estar muy consciente de su pecado, sin embargo no podía volverse atrás ya que amaba a su amante, en este caso ambos eran casados y sus respectivos cónyuges ignoraban que estaban siendo engañados.
¿Porque se da el adulterio?
La primera causa es definitivamente falta de amor hacia el cónyuge, sin embargo hay quienes aseguran amar a su pareja sin embargo la engañan porque su relación se ha vuelto rutinaria, les falta comunicación y se sienten faltos de comprensión y amor. Por otro lado hay quienes permiten que pensamientos insanos y fantasiosos hagan nido en sus mentes imaginándose en los brazos del hombre o mujer más hermoso(a) y atractivo(a) de la tierra (según corresponda), lo que provoca que se formen expectativas muy altas que jamás encontrara en su pareja y buscan satisfacer esa fantasía en alguien más.
Aunque nada justifica el adulterio delante de Dios, si debemos estar muy conscientes que la falta de atención, respeto y de amor hacia nuestra pareja, así como la indiferencia o falta de atención a la relación sexual pueden dar origen al adulterio.
He conocido casos donde varones cristianos se sienten rechazados por sus mujeres quienes piensan que la unión sexual no es bien vista delante de Dios o las hay también, quienes sencillamente no sienten el deseo sexual con la misma intensidad y al mismo tiempo que ellos y prefieren postergar la relación, por lo cual hace que ellos se sientan rechazados y piensen que no se les quiere.
En mi anterior estudio escribí sobre el tema titulado “Como debo amar a mi marido” el cual presenta en forma breve la característica fisiológica sexual que hace que el hombre sea más impulsivo que la mujer en este aspecto, sin que esto signifique que la mujer no sienta los mismos deseos por el varón, de ahí que es importante conocer la naturaleza sexual de nuestros cuerpos, e incrementar la comunicación franca y abierta entre los cónyuges.
La Biblia en 1ª Corintios 7:2-5 enseña que la mujer pertenece al varón y el varón a la mujer, e instruye en el sentido de satisfacerse mutuamente en el terreno sexual.
<7:2>7:2> pero a causa de las fornicaciones, cada uno tenga su propia mujer, y cada una tenga su propio marido.
<7:3>7:3> El marido cumpla con la mujer el deber conyugal, y asimismo la mujer con el marido.
<7:4>7:4> La mujer no tiene potestad sobre su propio cuerpo, sino el marido; ni tampoco tiene el marido potestad sobre su propio cuerpo, sino la mujer.
<7:5>7:5> No os neguéis el uno al otro, a no ser por algún tiempo de mutuo consentimiento, para ocuparos sosegadamente en la oración; y volved a juntaros en uno, para que no os tiente Satanás a causa de vuestra incontinencia.
El apóstol Pablo exhorta diciendo: “Mas vale casarse que estarse quemando” 1ª Corintios 7:9 pero si no tienen don de continencia, cásense, pues mejor es casarse que estarse quemando.
Una clara alusión a la necesidad sexual, por tanto al establecerse un matrimonio, se contraen obligaciones de este tipo que si bien es cierto no es lo más importante en la relación de pareja, si reviste de suma importancia en el buen desarrollo de su vida en común.
Algo que debe ser tomado en cuenta por quienes aun no se han casado, es que nunca la motivación sexual debe ser lo que les obligue a unirse en matrimonio, el factor más importante es el amor, ya que éste lo supera todo. Existen muchos fracasos matrimoniales cuya motivación inicial fue el sexo, tristemente en un breve lapso y al corto tiempo se dan cuenta tristemente que no es el valor más importante y dado que en ello fundamentaron su unión, tienden al fracaso rotundo.
Quien vive en adulterio debe saber que está ofendiendo a Dios, en primer lugar están mancillando el templo del Espíritu Santo el cual es su propio cuerpo. Leámoslo en: 1ª Corintios 6:15-20
<6:15>6:15> ¿No sabéis que vuestros cuerpos son miembros de Cristo? ¿Quitaré, pues, los miembros de Cristo y los haré miembros de una ramera? De ningún modo. <6:16>6:16> ¿O no sabéis que el que se une con una ramera, es un cuerpo con ella? Porque dice: Los dos serán una sola carne. <6:17>6:17> Pero el que se une al Señor, un espíritu es con él. <6:18>6:18> Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa, está fuera del cuerpo; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca. <6:19>6:19> ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? <6:20>6:20> Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.
Deben saber también que es un pecado deliberado para quienes el autor de Hebreos dice“terrible cosa es caer en manos del Dios vivo”
Hebreos 10:31 ¡Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo!
Dios no pasará por alto este pecado, por tanto, es tiempo de arrepentirse y volverse atrás y ser restaurado, recurrir a Cristo nuestro abogado.
1ª Juan 2:1 Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.
Poner en sus manos nuestros caminos para que Dios enderece nuestra vereda.
Proverbios 3:6 Reconócelo en todos tus caminos, Y Él enderezará tus veredas.
Para evitar caer en adulterio, y en apego a la Escritura le sugerimos tener en cuenta los siguientes pasos:
1.-> Basado en Proverbios 5:18 Sea bendito tu manantial, Y alégrate con la mujer de tu juventud,
1ª de Corintios 7:2 pero a causa de las fornicaciones, cada uno tenga su propia mujer, y cada una tenga su propio marido.
Desarrollar el amor verdadero dentro del Matrimonio a través de:
a.- Amar a la pareja y ser fiel.
b.- Cultivar la unión matrimonial.
c.- Cumplir cada uno el deber conyugal que le corresponde.
2.-> Recordar que Dios nos dio el mandato y la capacidad de dominar los deseos impuros en: Colosenses 3:5-10
<3:5>3:5> Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría; <3:6>3:6> cosas por las cuales la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia, <3:7>3:7> en las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas. <3:8>3:8> Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca. <3:9>3:9> No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos, <3:10>3:10> y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno,
3.-> Recordar que cualquiera que vive una vida impura, está excluido del Reino de Dios de acuerdo con 1ª de Corintios 6:9-10
<6:9>6:9> ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones,
<6:10>6:10> ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios.
4.-> Tener presente que nuestro cuerpo es para servir a Dios según:
1ª de Corintios 6:13 Las viandas para el vientre, y el vientre para las viandas; pero tanto al uno como a las otras destruirá Dios. Pero el cuerpo no es para la fornicación, sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo.
5.-> Considerar que nuestra unión con Cristo incluye nuestro propio cuerpo según se lee en: 1ª de Corintios 6:15-20
<6:15>6:15> ¿No sabéis que vuestros cuerpos son miembros de Cristo? ¿Quitaré, pues, los miembros de Cristo y los haré miembros de una ramera? De ningún modo.
<6:16>6:16> ¿O no sabéis que el que se une con una ramera, es un cuerpo con ella? Porque dice: Los dos serán una sola carne.
<6:17>6:17> Pero el que se une al Señor, un espíritu es con Él.
<6:18>6:18> Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa, está fuera del cuerpo; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca.
<6:19>6:19> ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros?
<6:20>6:20> Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.
6.-> Dios demanda pureza en nuestra vida y esto incluye el matrimonio y la familia pues: Mateo 5:8 Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios.
Gozaos en el Señor y en tu hogar.
Amen.
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