Yo se que Dios me ama, y sé que Él tiene planes y propósitos que quiere cumplir conmigo.
Hoy voy hacer todo lo posible por ayudar a las personas que me rodean lograr sus metas y ser felices.
Hoy no voy a tratar de controlar nada, ni nadie, sino que voy a permitir que Dios obre a través de mí. Voy hacer las tareas que me corresponden sin ansiedad y sin prisa.
Hoy no voy a responder negativamente a los conflictos que se me presenten, sino que voy a usar cada momento para beneficiar a alguien.
Hoy no voy a herir a nadie, ni voy a permitir que mis emociones me dominen sabiendo que Dios tiene el control.
Yo voy a vivir mi vida un día a la vez, tratando de eliminar todo lo que detiene mi progreso y mi relación intima y personal con Dios.
Hoy voy a construir mi vida sembrando amor en las demás personas.
Hoy voy a motivar a los que estén a mi lado a seguir luchando positivamente por sus sueños y anhelos positivos.
Yo renuncio a tener conflicto con las personas que amo.
Yo renuncio a la murmuración, a la venganza, al odio, a la envidia, y a los celos.
Yo estoy contento con mi vida y estoy agradecido a Dios por otro día más para poder amar a los demás.
Yo estoy lleno del amor de Dios y siento paz, por eso, no me voy a afanar por nada, ni me voy a preocupar por las cosas que no puedo controlar.
Hoy voy a vivir para Dios y soy un regalo de Dios para el mundo.
Yo soy manso, y humilde de corazón y voy a vivir una vida simple, y sencilla, añadiendo valor al mundo venciendo todo lo malo haciendo el bien, en el Glorioso Nombre de Jesús lo haré… Amén.
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